Me encuentro en la Academia de Danza Coppelia; en la sección de Baile Español, Aula de Flamenco, para entrevistar a su directora y profesora Susana Navarro.
Susana estudió baile español en el Conservatorio de Música y Danza de Valencia, y luego de pasar los seis años obligatorios para diplomarse lo hizo en 1996.
Me recibe y a bocajarro le sorprendo con esta pregunta:
"Susana: tú naciste en Castellón, donde has vivido siempre; eres hija de madre manchega y padre sevillano-cordobés, ¿que fuerza tuvo el gen Navarro para que tu vida se decantase por este camino? Pues yo creo que toda, porque de hecho alguna amiga de mi madre, de Caridad, me ha llegado a decir que me parezco a las mujeres de Julio Romero de Torres. ¡Pero si tu eres rubia! (risas). Exacto, yo soy rubia, y allí que me fuí -este verano cuando se casó mi primo- al Museo, que ya había ido várias veces, pero fijándome más todavía, y puede ser que tenga razón, que me parezco. ¿Qué me dices?. Pero si son muy morenas y a tí te veo tan rubia. Pero con el pelo recogido y la gomina todas somos morenas. Ya te digo. Pero tú pocas veces te lo recoges. Cuando bailaba, todos los días: moño y horquillas. O sea que el Navarro fué decisivo. Decisivo, yo creo que sí.
¿Cómo y cuándo descubriste que tú querías optar por ésto, y cómo reaccionó papá Javier? (risas) Pues yo estaba en Castellón con Adelaida, que tenía una academia que se llamaba Camaraes, y ya desde allí, desde pequeñita me ponía detrás del sillón a bailar y todo lo que salía en la tele, yo a imitar. Ballet clásico: yo de puntitas; español: con las palmas... Pero luego lo que pasa es que tienes una edad que hay que estudiar, es evidente; entonces lo intenté compaginar... Y es cuando papá Javier te dijo: niña más bién con la palmas; más que con las puntitas ¿o no? Seguro, seguro que sí; porque lo primero que me regalaron ese año los Reyes fué una falda de lunares naranja y verde. Yo recuerdo dos anécdotas muy entrañables de tu padre: siendo tú muy jovencita, en la boda de Macu, -eras muy niña y ya bailabas sevillanas- empezaste a bailar, y Mª Teresa Ruíz fué y le colocó a tu padre un pañuelo a modo de babero, porque se le caía la baba. (risas) Sí, me acuerdo. Y tengo otro detalle de hace unos años, ya con el ballet de aqui, de fín de curso en el Teatro Principal, en una de esas demostraciones que haceis cara al público, bailabas tú con el sombreo Sí, fué una farruca, una farruca, eso, y a la salida me dice: ¿sabes que he llorado al ver a Susana? y yo le contesto: no me extraña; ¡he llorado yo y no soy su madre...!
Susana: cuando terminaste tu carrera, se te hicieron buenas ofertas para ir fuera de Castellón, incluso al extranjero; pero hubo "algo" por lo que te negaste. ¿ A ese "algo" le podríamos llamar Albert ?. Puede ser, puede ser... Puede ser Albert y la edad. Porque me llamaron para ir a Madrid, para ir a Japón... pero pensé: mis compañeras todas con 17, 18 años y yo con 26. ¿Dónde me plantó yo? ¿Dónde voy a Japón?. Tu te retrasaste porque tuviste que compaginar con los estudios, pero no creo que la edad te hubiera impedido... la edad siempre marcando a las mujeres, y es un error. Sí es un error. Pero lo que pasaba es que también teníamos aqui la oportunidad de que Adelaida cerraba la academia y María y yo podíamos empezar algo, hacer algo, y nos pareció una buena oportunidad. Muy interesante para Castellón y para todos. Sobre todo por eso. ¿Acertaste plenamente en esta negativa?. Plenamente. Entonces ¿estás contenta?. Muy contenta; satisfecha.
Susana: tengo entendido, corrígeme si me equivoco, que el baile español se divide, o consta de: baile clásico, flamenco, escuela bolera, y folclore. Sé que en tus aulas se imparten las tres primeras modalidades, pero la cuarta creo que no ¿por qué? ¿ El folclore?. Hacemos cursos especiales para la Magdalena, por ejemplo, para las fiestas... Salida al Pregó... Efectivamente, porque si no la gente no se interesa. En Aragón supongo que mucho más. En Aragón mucho, en Cataluña... En Cataluña también; son tradiciones, pero aqui no. Y además hay otros centros, está el Ayuntamiento, pequeños grupos...
Tienes alumnas de todas las edades; tal vez desde los seis años, adolescentes, jóvenes y señoras. Y he visto que en algunos casos tus alumnas pequeñitas son hijas de mamás que están o han estado en tus clases. Y por otra parte es al revés, ¿cuantas mamás que tienen a sus niñas aquí se han animado también ellas ?. Pues mira ahora mismo tango a várias, sobre todo he recuperado a una, además amiga mía, trae a la niña y viene ella también a clase de flamenco. Ya vino en su día, antes de casarse; y luego de toda su tarea de madre, ahora ha vuelto. Y tengo también amigas de La Consolación que traen aquí a sus hijas y que ellas han venido también a aprender sevillanas o ballet. ¿Hay alguna abuela también?. También, también... Porque yo veo caras que digo: a mi me parece que éstas son abuelas de las niñas. También, claro que sí. Es que el flamenco llega a todas partes, sobre todo las sevillanas. Las sevillanas es un baile tan alegre, que te levanta de la silla, estés donde estés. Y el ánimo, todo. Pero en Castellón ¿tú crees que hay mucho ánimo de flamenco?, ¿tú cómo lo ves?. Hum... bueno no sé, a lo mejor sí; quizá es más la danza española. El flamenco está muy... pobrecito... Sí, esa es la palabra: pobrecito. Quizá es a causa de los prejuicios, sí, sí. No hace mucho, me decían a mi indignados, que hablando con uno, comentaba en sentido peyorativo: yo es que el flamenco siempre lo he asociado a los bares, el vino, las palmas... Como si fuera, en primer lugar de tercera categoría, y en segundo lugar el vino, las palmas ¿que pasa?. No pasa nada pero lo ven asi. Sí, sí. Pero fíjate que hoy por hoy, ahora van a haber unas demostraciones, o recitales, o actuaciones, como queramos llamarle, en el Palau de la Música de Barcelona, con Paco de Luía y no recuerdo qué otras figuras del mundo flamenco actual. Y en el Teatro Real también actuó, que por cierto se oyó un ¡viva la madre que te parió!... Tenemos la concesión del Premio Principe de Asturias a Paco de Lucía, asi como todos los años el Ministerio de Cultura está galardonando el cante, el baile...No es en absoluto de tercera categoría. Nada: hay que luchar por él; hay que ponerlo en el lugar que le corresponde y nada más.
Bueno te voy a hacer otra pregunta hablando de todo ésto de las mamás, de las abuelas, que todas participan, pero ¿qué me dices de los caballeros?. Qué pasa con ellos. Creo que se podrían contar con los dedos de la mano los que se acercan por aqui con fines de aprender, ¿ a qué es debido?. Los caballeros tienen más prejuicios todavía. Yo recuerdo un amigo nuestro que vino a aprender sevillanas, las aprendió y se fué... claro era el único... Lo consiguió y ya está.
Voy a meterme otra vez con Albert (risas de Susana). A ver, cuéntame ¿qué parte toma Albert en todo ésto?. Porque los que le conocemos sabemos que es castellonero"de la soca", como por aqui se dice. Te oi decir una vez, y me hizo mucha gracia, que ya palmeaba, y que lo hacía muy bién, pero ¿en qué eslabón está ahora?. Son de las mejores palmas que he oído en mi vida. El sonido más limpio y más bonito. Parecen de mujer; más bonitas que las mías; es impresionante. Pero bueno y ¿de ahí no pasó?. Me acompaña en las sevillanas. Bailarlas no sabe, pero se pone delante de mí... Y se defiende. Es que la sevillana en el hombre es más facil. Bueno no es que sea más fácil. Que los bailarines en el Conservatorio se lo aprenden igual que nosotras. Pero luego, se ponen delante, se mueven un poquito... Sí, sí, y acompañan a la chica.
Los puntales del flamenco son el cante, el baile, y la guitarra. Tú estás plenamente definida por el baile, pero ¿qué sientes , cómo influyen en ti los otros dos?El cante, el cante impresionante, y la guitarra me pierde, no lo puedo remediar pero me pierde... Pero tú ¿haces guitarra?. No, no, yo fui a aprender cajón, ahora mismo para mis alumnas, porque muchas veces cuando se aprenden los ritmos se aprenden mejor con palo o percusión, porque hay que aprender compás. El compás es con cajón. A ellas les va a gustar mucho más, les va a parecer más ameno. Porque el cajón en sus primitivos orígenes no existía... No, no. No sé si es de África o América. Ahora yo no sé decirlo... Sí, pero no es nuestro. Al principio sí fué al golpe, pam, pam, pam...
A ver, Susana, para muchos de nosotros, el flamenco es nuestra afición, con lo que cubrimos nuestras horas fuera del trabajo habitual. Para ti que es al revés, que ésto es tu trabajo, ¿en qué llenas tus horas de ocio? Pues mis horas de ocio... ahora estoy estudiando (risas de Susana), en la U.N.E.D., llevo ya tres años. Estudio Historia. Me encanta, porque como me gusta saber... Es que el saber es una cosa... Claro que sí, aunque llego tarde, yo si no hubiera hecho danza, hubiese hecho ésto. Y lo he hecho al revés. Pero el cuerpo manda. Has hecho bien. Ésto se tiene que empezar de niña. Tú lo verás en tus clases con tus alumnas: empieza una niña, una adolescente, una joven... todo va bien. Pero ¿verdad que con las mamás, con las abuelas no es lo mismo? No es lo mismo, claro, no está el cuerpo... Ni reflejos, ni ritmo, ni oído... Por eso estudiar puedes hacerlo ahora, de más mayor. No has llegado tarde para nada.
Y díme: ¿cómo ves tu el flamenco en Castellón? ¿Hay mucho entusiasmo, poco...? ¿Va en alza?. Cada vez más. Yo estoy optimista. Este año llevamos un añito y medio muy bueno. Se ha visto en Burriana, en Villarreal, Almazora, mucho, mucho. Sí, también en Castellón várias cosas. Hemos tenido el Amor Brujo, dos actuaciones de dos Lámparas Mineras. Además todos los años tenemos en Burriana una Prueba de Selectividad para el Festival del Cante de las Minas; hay doce pruebas, o catorce, ahora no estoy segura, en España , y una está en Burriana. Eso es mucha categoría.
Ahora, sin que yo te pregunte, dime Susana, lo que tú quieras; algo de tu experiencia en la academia, lo que te parezca. Pues cuando me dijiste que venías, que íbamos a charlar un rato, me estuve acordando de los cursillos que hice; que me iba a Córdoba, que me iba a Madrid, a Tarragona, a Valencia... todo el tiempo libre estaba estudiando; y me acuerdo de una señora que me marcó: Milagros Menjibar, que es una bailarina impresionante, y que cada vez que pasaba decía: asi se hace, sí señora mía. Igual a la de al lado o a la de detrás ¿no?. Nos tenía muy motivadas. Aprendimos en quince días más que en todo el año... Y luego la vemos por la noche en el Teatro Gran Capitán en Córdoba que bailó una guajira sensacional, y al día siguiente: en clase. Era un encanto, de verdad. También el Maestro Granero; luego con Manolete... He hecho un cursillo con Antonio Canales, que me decepcionó un poco. Pero bueno, eso fue por lo que sea, ese día... Fue por la aptitud, no por las clases: llegó tarde, en chandal, en zapatillas de deporte, una cosa que no era muy correcta. Tenía sus dos primeros bailarines y tiene que dar ejemplo de todo. Pero bueno, yo como le quiero mucho, y me gusta mucho... pues como perdonar es vivir...
¿Cual es tu principal figura del baile?. A mi siempre me ha gustado Cristina Hoyos, me encanta, y luego Sara Baras, es que es maravillosa esa mujer. ¿Y de hombres?. Me gusta mucho Antonio Márquez, y Antonio Gades, ha sido para mí una gran figura, y estoy segura que para todo el mundo. Y un caballero. Como persona. Como persona, como bailarín, como todo. Sí, sí, ya lo creo.
Para finalizar, esta castellonera-andaluza-manchega, ¿que diría del flamenco a las gentes de Castellón y de todas partes? Qué tengo que decir. Que ésto hay que vivirlo también un poquito. Hay que dejarle la puerta abierta, porque dejamos tantas puertas abiertas a todo, tanto, tanto, y de lo nuestro, que es nuestro, no le damos ni ocasión. Es que pasa en todas las facetas de la vida, lo nuestro parece que no tenga importancia, y cualquier cosa de fronteras para allá es que todo vale. ahora parece que la cosa está cambiando... Es cierto, asi que yo animo a todo el mundo a que se escuche, a que se vea... que por ahi se empieza.
Gracias, Susana. Que de esta academia sigan saliendo buenas diplomadas, como hasta ahora, y que alguna lleve nuestro Arte por todo el mundo. Claro que sí, muchas gracias a ti.
2 comentarios:
Interesante entrevista,Ramona me encantó,me gusta la frase de tu entrevistada 'dejar la puerta abierta',cuando se refiere al flamenco es casi un eslogan dejarle la puerta abierta al flamenco,la entrevista me resulto cálida y amena,es una persona muy cercana,que siente pasión por lo que hace y seguro se refleja en sus alumnas,no hay nada mejor en la vida es el aspecto laboral que dedicarte realmente a lo que te gusta,coincido con ella en muchos aspectos,nuevamenta Ramona, estupenda,la leí con verdadero gusto.....
Muy buena entrevista y la tuya también.
Ya puedes escuhar el audio del programa de radio pulsado aquí:
RadioBlog Enero
Muchas gracias por todo
Pd. Tu comentario si salió lo que pasa que estaba en la segunda página de comentarios
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