6/5/09

Rafael de León

Por el interés que encierra, y dado que su tema cabe perfectamente en este blog flamenco, voy a transcribir íntegro el capítulo que lleva el nombre Rafael de León del libro de Eduardo Haro Tecglen titulado "El niño Republicano":

"Miguel de Molina - ya saldrá: enseguida - contaba como nació la famosa canción Ojos verdes. En Barcelona, la noche del estreno de Yerma, se reunieron en un café él mismo, Lorca y Rafael de León; en una servilleta, Rafael de León iba apuntando sus versos - verde como el trigo verde / y el verde, verde limón - y Lorca decía "Rafael el verde es mío"; "No creas que tienes la exclusiva del verde en poesía", le replicaba Rafael. Así fueron haciendo la copla, que el propio Miguel haría famosa con la música de Quiroga. El poeta Rafael de León fué un epígono de Lorca, pero con su propio talento. Es un poeta en revisión por los intelectuales posmodernistas, como el maestro Quiroga ha sido adoptado por los músicos: ¡la estofa del tiempo! Fue puramente popular , y mucho: sus tonadillas se cantaron en la República, durante la guerra - a cada lado de las trincheras - y mucho después de ella. A Miguel de Molina ya no le dejaron cantarlas - nunca fue prohibido; pero le persiguieron continuamente y le apalearon rufianes de renombre y cargos, de los cuales da nombres; y tuvo que huir -; pero siguieron las grandes como Concha Piquer, Estrellita Castro y otras muchas.
Fue una gran época de la canción y la poesía populares. Definían una Andalucía que los intelectuales preferían más honda, más grave: como la de los poemas de Lorca, los Machado, Juan Ramón Jíménez y un casi infinito etcétera. Pero también Rafael de León dramatizaba Andalucía: sus canciones son narraciones breves y amargas, escritas como brevísimas piezas de teatro, donde a veces salta la metáfora surrealista brillante - entonces el pueblo las comprendía directamente - y cierta forma de sufrimientos. Cada canción era un personaje. Ahora se dice que ensalzaba a los marginados: gitanos, gentes de prostíbulo, amores vendidos y amores prohibidos por la sociedad, mujeres que se perdían... Él mismo fué marginado voluntario: bajó - o subió - su título de conde de Gomara hasta los cafetines y los amores también nefandos. Ah, no era un hombre único: estaban con él colaboradores y compañeros en este género y en esa época: los poetas Valverde, Quintero, Ochaíta, Xandro Valerio, Rafael Duyós... Los músicos Quiroga, Solano...Las tonadilleras Estrellita Castro, Pastora Imperio - genial -, Piquer y el propio Miguel de Molina - el mejor -, y Lola Flores, y Manolo Caracol, y las llamadas "folklóricas" que aparecieron después de la guerra... Justo, en fin, por la notabilidad propia de Rafael de León, poeta de libros, además de canciones."

5 comentarios:

Juan Duque Oliva dijo...

Que me gusta todo lo relacionado con la parte verde de la copla.

Lástima que haya tranta tragedia detrás.

Un beso

PEÑA CULTURAL FLAMENCA ANDALUZA LUIS DE CÓRDOBA dijo...

Pese a amar el flamenco yo lo descubrí después de la copla y recuerdo como si fuese ayer como me quedaba abobada delante de la tele viendo el gran programa de talentos ( que no tiene nada que ver con lo de ahora), "Gente Joven" a esas aspirantes a grandes de la copla, que como bien dice en tu párrafo eran y son, si son bien interpretadas, pequeñas obras de teatro en su mayoría amargo y trágico, que te ponen los sentimientos a flor de piel. Yo entonces esperaba ansiosa la aparición de la bailaora, de turno con su gran bata de cola, Ay¡ todavia sueño con ponerme algun dia una de esas. Un besote. Raquel

La Gaceta Flamenca- Ramona dijo...

Si, Luz de Gas y Raquel, que grandes fueron... y que mal se portaron algunos con algunos de ellos.
Todo cuanto hagamos por engrandecer su recuerdo es poco, frente a esa encorsetada manera de pensar de muchos españolitos de la época...
Un beso para los dos.

América dijo...

Letras que son verdaderas joyas de arte dentro de la literatura,poesía,música e interpretación de un genero que ha dado a conocer España por todo el mundo.

Emocionan en su conjunto creo que a todos los que nos gusta tenemos alma coplera.

Ojos verdes, verdes como, la albahaca. Verdes como el trigo verde ....


Verde que te quiero verde, verde viento, verdes ramas. El barco sobre la mar....Lorca.

La Gaceta Flamenca- Ramona dijo...

América, efectivamente ¡cuanta riqueza convertida en verde...!