Memorial

Lo había dejado para el final. Quería que las entradas del año 2009 en "La Gaceta Flamenca" se cerrasen con el broche de oro del recuerdo a unas figuras inmensas en el mundo flamenco, de las que este año se ha cumplido un siglo de su nacimiento: Antonio Mairena y Manolo Caracol; dos estilos distintos para gustos diferentes.

Cabe recordar que ambos tuvieron un papel importante en momentos difíciles en que se temía por la pérdida de autenticidad del cante, y por la incomprensión de él en determinados sectores.

Manolo Caracol participando con solamente 12 años -y ganando el primer premio ex hequo con El Tenazas de Morón- en el Concurso de Cante Jondo de Granada de 1922, que organizaron Dn. Manuel de Falla y Federico García Lorca, para cortar con aquel menoscabo que creían estaba empobreciéndolo.

Antonio Mairena, años más tarde, en la década de los 50, desempeñando una importante labor de recuperación de esa autenticidad que se degradaba con un flamenco adulterado y barato.

En su devenir, Caracol eligió con éxito el camino del espectáculo; las zambras que tanto le caracterizaron y la Ópera Flamenca con la que recorrió mucha geografía; aunque mantuvo en Madrid la vida de tablao donde se recibía a cantaores que acudieron buscando reafirmarse en una fama en la que ya empezaban a sobresalir. Cantaores jondos, como él mismo lo fue aunque se dedicase menos a ello

Mairena se dió por completo al cante grande de raíces puras considerándosele como uno de los mejores del momento, y asi ha llegado hasta nosotros.

Se han celebrado igualmente los 100 años del nacimiento de Antonio Perez, "El Sevillano".

Otro gran cantaor que si bien no brilló con la misma luz que los anteriormente expuestos, sabemos de su también gran valía.

Fue precisamente Mairena quien lo situó "como una de las primeras figuras entres los fandangueros ilustres"

Él decía de sí mismo: "Yo hago tos los cantes, conozco tos los cantes, aunque parece que lo que más ha quedao han sido mis fandangos. En mis fandangos tal vez lo dificil esté en el final. Es una cosa de velocidad. Hay que recortar y decirlo to en un momento. Mi cante es recortao, no se puede alargar. Efectivamente yo he tenido pocos imitadores de mi cante, pienso que porque no podrán, por esa dificultad que he dicho"

La vida tiene estas ingratitudes: dar más fama a unos que a otros; pero hoy aquí a los tres se les recuerda por un igual.

No voy a resaltar más los valores de estos cantaores. Ya se ha hablado a lo largo del año, y todos los conocemos lo suficiente como para que yo no tenga nada nuevo que añadir. Quiero únicamente situarlos en mi blog, como se merecen, en un lugar destacado.

Antonio Mairena, Manolo Caracol, Antonio El Sevillano: un aplauso más entre los tantos que en vida recibísteis.

(Fotografías extraidas de la literatura de los discos)